Cómo hacer torrijas de leche y canela

Las torrijas de leche y canela son un clásico de la repostería tradicional española. Una receta sencilla, reconfortante, llena de tradición y perfecta para disfrutar en compañía.
Las torrijas también triunfan en otros países bajo el nombre de pain perdu, en Francia, arme ritter, en Alemania o fatias douradas, en Portugal. Un postre de aprovechamiento con el que convertirás las rebanadas de pan del día anterior en un postre irresistible con una textura tierna y un sabor muy dulce, gracias a la mezcla suave de leche infusionada con canela y piel de limón.
Contenidos
Lista de ingredientes:
2 barras de pan o pan especial para torrijas.
1 palo de canela en rama.
4 huevos medianos.
1 litro de leche entera.
100 g de azúcar.
Piel de un limón.
Aceite de oliva o de girasol.
Canela en polvo.
Utensilios necesarios:
Una cacerola.
Un cuenco mediano.
Una cuchara de madera.
Una cuchara.
Una fuente.
Unas varillas.
Una espumadera.
Papel absorbente de cocina.
Cómo hacer torrijas de leche y canela, paso a paso
- Calentar a fuego lento la leche junto con el azúcar, la piel del limón y la rama de canela en la cacerola.
- Dejar hervir a fuego lento mientras se remueve la mezcla para asegurar que el azúcar se disuelve por completo.
- Para infusionar los sabores, retirar la cacerola del fuego una vez que todo esté bien integrado y dejar enfriar por completo.
- Una vez que esté frío hay que sumergir cada rebana de pan en la leche y asegurar que ambas caras estén bien cubiertas.
- Dejar que el pan se empape bien. El tiempo de remojo depende de la textura que se busque y de la dureza del pan. Para una textura más suave dejar el pan más tiempo en la leche.
- Retirar y rebozar las rebanadas en huevo batido, bien empapadas.
- Calentar a fuego medio el aceite de oliva en una sartén grande.
- Freír las torrijas por ambas caras hasta conseguir un tono dorado.
- Una vez listas, dejar reposar sobre papel absorbente de cocina para quitar el exceso de aceite.
Historia de las torrijas de leche y canela
La primera aparición de las torrijas se remonta a la antigua Roma, en un manual de recetas medievales conocido como el recetario de Apicius. Es el libro de cocina más antiguo de Occidente, con más de 1200 años y qué contiene una preparación que consiste en empapar pan en leche y miel. Pero no fue hasta el reinado de Fernando de Aragón e Isabel de Castilla cuando comenzaron a documentarse recetas similares en la Península Ibérica.
En sus comienzos, las torrijas no estaban ligadas a la Semana Santa. Se ofrecían como alimento nutritivo y reconfortante para mujeres que acababan de dar a luz debido a sus propiedades. Con el tiempo, su vinculación con la tradición religiosa terminó formándose por tres características principales: era un alimento saciante, económico y estaba libre de ingredientes prohibidos durante la cuaresma. Terminó convirtiéndose en una seña de identidad cultural de la Semana Santa.
En la actualidad, este dulce se ha incorporado a la vida cotidiana de muchas familias y se ha extendido a otras culturas. Incluso los mejores chefs y reposteros reinterpretan esta receta con toques creativos y contemporáneos.
¿Con qué combinar las torrijas de leche y canela?
- Frambuesas y menta: Acompañar las torrijas con unas frambuesas y menta, le dará un toque ligeramente ácido, fresco y dulce.
- Helado: Una bola de helado es el acompañante perfecto para este postre tradicional.
- Miel: Añadir un poco de miel para potenciar la dulzura. Un sabor que combina perfectamente con este postre.
- Ralladura de cítricos: Agregar ralladura de limón o de naranja por encima de las torrijas al terminar, le dará un toque extra de cítrico.
- Arándanos: Acompañar tus torrijas con unos ricos arándanos frescos aportará un toque de frescura y un sabor afrutado.
Consejos para las torrijas de leche y canela perfectas
- Depende del pan que se utilice, el tiempo de remojo en la leche será mayor o menor, para evitar que se deshaga. Puedes utilizar cualquier tipo de pan.
- Mejor sumergir poco a poco el pan en la leche y no de golpe. Así evitarás que se deshaga.
- Para dar un toque extra de dulzura puedes espolvorear una mezcla de azúcar y canela sobre ellas al terminar.
- Añadir piel de naranja al limón del infusionado en la leche antes de remojar las torrijas hará que les dé un toque aún más cítrico.