Receta de tarta de queso de frutos rojos sin horno

La tarta de queso o cheesecake de frutos rojos sin horno es una variante deliciosa de la tradicional tarta de queso. La suavidad del queso crema, el crujiente de la base de galleta y la acidez de los frutos rojos forman una combinación de diez. Esta tarta es el postre ideal para todo tipo de reposteros, ya que es una receta súper sencilla de preparar y rápida, puesto que no necesita horneado. Además, esta versión de la tarta de queso es, sin duda, perfecta para todo tipo de eventos y celebraciones, así que te animamos a prepararla siguiente estos consejos.

El ingrediente estrella de la tarta de queso sin horno

Aunque existen muchos tipos diferentes de cheesecake, todas tienen algo en común: su cremosidad. Para conseguir la textura perfecta, firme pero a la vez cremosa, la clave no está en la nata como muchos podríamos pensar, sino en conseguir el equilibrio entre todos los sabores respetando las cantidades de cada uno de los ingredientes de la receta. En realidad, abusar de la nata podría terminar diluyendo el sabor. Sin duda, el protagonista de esta receta para conseguir una textura irresistible será el queso crema.

¿Por qué utilizar queso crema en esta receta?

El queso crema es mucho más que un queso para untar. Es un ingrediente muy versátil que se utiliza en aplicaciones tanto saladas como dulces, por eso es un gran recurso en la cocina.

En repostería, además de usarse para decoración y coberturas, puesto que aporta un acabado brillante y un ligero sabor ácido, también es habitual que sea el ingrediente protagonista de infinidad que tartas de queso frías.

Una de sus ventajas es que se integra perfectamente con el resto de ingredientes, lo que nos permitirá obtener una mezcla sin grumos y homogénea. Además, al ser rico en grasas, le aportará a la cheesecake la densidad adecuada para que se mantenga firme y consistente, sin perder esa ligereza tan característica de este tipo de postres.

Lista de ingredientes

Además de queso crema, estos son los ingredientes que necesitarás para preparar esta deliciosa tarta de queso sin horno. ¡Toma nota de todos ellos!

• 200 g de galletas tipo digestive
• 4 láminas de gelatina sin sabor
• 100 g de azúcar glas
• 400 g de queso crema
• 200 ml de nata para montar
• 150 g de frutos rojos
• Mermelada de fresa
• Extracto de vainilla
• 100 g de mantequilla

Utensilios necesarios

• Un molde desmontable para tartas
• Tres cuencos
• Mortero
• Varillas
• Batidora
• Un cazo pequeño
• Una sartén
• Una espátula
• Una cuchara

Cheesecake de frutos rojos sin horno, paso a paso

Sigue los siguientes pasos para preparar la tarta de queso sin horno perfecta:

1. Retirar los ingredientes de la nevera para manipularlos a temperatura ambiente.
2. Fundir la mantequilla en una sartén lentamente, a fuego medio o bajo.
3. Triturar las galletas en un mortero hasta lograr una textura en polvo. También puedes machacarlas utilizando un rodillo o una batidora o robot de cocina.
4. Mezclar el polvo de galleta y la mantequilla en un cuenco hasta que resulte una masa consistente, como de arena mojada.
5. Cubrir la base del molde con la masa homogénea de galleta y mantequilla fundida. Presionar ayudándose de una cuchara o espátula para que la base de la tarta quede compacta.
6. Meter el molde con la base de galleta en la nevera hasta que se solidifique.
7. Hidratar en otro cuenco con agua tibia las láminas de gelatina hasta que se derritan.
8. Batir el queso crema junto al azúcar glas y una cucharada de postre de extracto de vainilla hasta conseguir una textura cremosa homogénea.
9. Agregar a la crema 100 g de frutos rojos y triturarlos con la batidora.
10. Añadir la gelatina previamente hidratada a la crema de queso.
11. Montar la nata con una batidora o robot de cocina e incorporar a la crema. Mezclar todos los ingredientes con la espátula hasta integrarlos por completo.
12. Verter la masa en el molde sobre la base de galleta. Utilizar la espátula para extender el queso crema de manera uniforme.
13. Enfriar la tarta en la nevera durante un mínimo de 6 horas.
14. Decorar la tarta con una capa de mermelada de fresa y frutos rojos enteros.

¿Qué añadir a la tarta de queso sin horno?

• Ralladura de limón: agrega ralladura de limón a la masa para un toque cítrico.
• Mermelada de fresa: sorprende con una capa de mermelada entre la base de galleta y la mezcla de queso crema para aportar un sabor más intenso y un toque de color.

Consejo para la tarta de queso de frutos rojos sin horno perfecta

• Temperatura: recomendamos trabajar con los ingredientes a temperatura ambiente, por lo que antes de comenzar a preparar la tarta, debes sacar todos los alimentos de la nevera.
• Refrigeración: asegúrate de mantener la tarta durante un mínimo de 10 horas en la nevera para que su textura sea sólida y consistente. Lo ideal es prepararla de un día par otro.
• Montar la nata: no olvides que para montar la nata, ésta debe estar fría. También el recipiente debe estar recién salido de la nevera.
• Decoración: agrega los frutos rojos enteros o cortados antes de servir este postre, para que se mantengan frescos y no se oxiden. Además, si vas a extender una capa de mermelada por encima de la tarta, un truco muy práctico es calentarla en el microondas unos 30 segundos. Así conseguirás que se haga más líquida y te resultará más sencillo extenderla.
• Mini tartas individuales: puedes utilizar un molde grande para una tarta de queso sin horno tradicional, pero aconsejamos usar vasos o tarros de cristal para hacer versiones mini individuales, puesto que lucen mucho más en la mesa.
• Molde: una buena opción es que el molde sea de silicona, porque así resultará más fácil desmoldar la tarta. También son prácticos los moldes desmontables, pero te recomendamos forrar el fondo con papel vegetal y engrasar las paredes con mantequilla previamente.
• La fruta, una gran aliada: esta receta de tarta de queso sin horno admite un montón de variaciones. Anímate a sustituir los frutos rojos por otra fruta y el resultado será igual de sorprendente: melocotón, limón, naranja amarga… ¡El resultado no dejará a nadie indiferente!