¿Cuánto engorda la leche condensada? Recomendaciones de consumo

La leche condensada es un ingrediente que combina a la perfección con cafés o en elaboraciones reposteras. Es un producto rico en vitaminas y en minerales, pero también tiene un alto contenido en calorías y azúcares, por lo que su consumo debe realizarse de manera controlada. En este artículo de Mundo Lácteo, conoceremos todo sobre la leche condensada: qué es, recomendaciones de consumo, origen y cómo elaborarla en casa.

¿Qué es la leche condensada?

La leche condensada es un alimento obtenido de la eliminación de parte del agua que contiene la leche en origen y la posterior adición de azúcar.Una vez completado este paso, es sometida a un tratamiento térmico con el fin de garantizar la estabilidad del alimento a temperatura ambiente, mientras el envase esté cerrado.

La Real Academia Española (RAE) define la leche condensada como aquella “leche que ha sido descremada total o parcialmente, calentada al vacío hasta eliminar tres cuartas partes de agua y a la que se le ha añadido una gran cantidad de azúcar: se conserva envasada herméticamente para mantenerla comestible durante mucho tiempo y se toma mezclando una pequeña porción de agua”.

El Ministerio de Consumo del Gobierno de España explica que, al eliminarse la mayor parte del agua durante su elaboración “tiene sus nutrientes concentrados, lo que aumenta en gran medida su proporción”. La leche condensada es fuente de vitaminas de los grupos A, B y D, y de minerales, como el calcio, el fósforo, el zinc y el magnesio.

¿La leche condensada es lo mismo que la leche evaporada?

Es importante saber que la leche condensada no es lo mismo que la leche evaporada. Ambas siguen un proceso de elaboración similar, pero su sabor es completamente diferente. La leche condensada tiene azúcar añadido o cualquier otro tipo de edulcorante, presenta una textura más densa y tiene un color amarillento. Como ya explicamos en otro artículo de Mundo Lácteo, la leche evaporada presenta una tonalidad similar a la leche de vaca y tiene un sabor más neutro, lo que la hace ideal para suavizar cremas o purés.

Perfil nutricional de la leche condensada: ¿Cuánto engorda?

La leche condensada es empleada para la elaboración de postres, por lo que es recomendable limitar su consumo, ya que es altamente calórica. Este ingrediente tiene 321 calorías por cada 100 gramos de producto, 8 gramos de grasas (4,6 de las cuales saturadas), y 54,9 gramos de hidratos de carbono, como podemos comprobar en la siguiente tabla:

Composición nutricional de la leche condensada por cada 100 gramos

*Fuente: Nestlé

Recomendaciones de consumo de la leche condensada 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda reducir el consumo máximo de azúcar al 5% de la ingesta calórica total diaria para un adulto con un índice de masa corporal normal; esto equivale a unos 25 gramos al día. Por tanto, el consumo de este producto no debería superar los 13 gramos al día. El Ministerio de Consumo señala que “su consumo no se considera adecuado en aquellas enfermedades en las que se deba controlar la ingesta de azúcares, como diabetes, los triglicéridos elevados y la obesidad”.

El Departamento de Prevención de Enfermedades No Transmisibles de la OMS explica que “la ingesta de azúcares libres es uno de los principales factores que están dando lugar a un aumento de la obesidad y de la diabetes en el mundo”.

El Estudio Nutricional de la Población Española (ENPE) ha revelado que más de la mitad de los españoles (un 53,6%) padece obesidad o sobrepeso. En este sentido, la Sociedad Española de Cardiología explica que las comunidades con las tasas de obesidad más altas del país son Andalucía y Galicia (26,7%), seguidas por el Principado de Asturias (26,2%) y la Región de Murcia (25,7%). Baleares (11,7%), Cataluña (16,1%) y País Vasco (16,5%) cuentan con las tasas de obesidad más bajas.

El exceso de azúcar en la dieta diaria también está relacionado con otros problemas: aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, de hipertensión, de diabetes e incluso puede propiciar la aparición de caries. Por este motivo, las diferentes organizaciones de salud recomiendan un consumo responsable de alimentos o de bebidas azucaradas.

Quién inventó la leche condensada y en qué recetas se emplea

El origen de la leche condensada data del siglo XIX, cuando el norteamericano Gail Borden Jr “encontró la inspiración en un cápsula de evaporación que había visto utilizar para condensar zumo, y era capaz de reducir la leche sin quemarla ni cuajarla” explica el Ministerio de Consumo del Gobierno de España.

La leche condensada no llegó a Europa hasta el año 1866, 14 años más tarde de su invento. Sin embargo, en los inicios de la comercialización de la leche condensada en España, esta sufrió cierto rechazo entre las clases altas de la época, mientras que las clases obreras la encontraron altamente nutritiva.

Respecto a sus usos más comunes, la leche condensada es empleada en una gran variedad de elaboraciones reposteras, pero también es un perfecto aliado del café. La leche condensada puede ser utilizada en el arroz con leche, en bizcochos, en flanes, en tarta de manzana, en magdalenas y en torrijas para darle un toque de esponjosidad extra.

¿Cuál es la oferta disponible en los supermercados?

La Lechera de Nestlé es una de las firmas más conocidas del sector de las leches condensadas. Dispone de varios formatos de leche condensada (original, desnatada y veggie) con el objetivo de satisfacer las necesidades de cada consumidor. Además, las marcas blancas de los supermercados (Carrefour, Lidl, Mercadona, Día y Alcampo, entre otros) también disponen de este producto indicado para recetas reposteras y para el café.