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La zanahoria es un alimento tan versátil que es un ingrediente esencial en múltiples recetas saladas, pero también en postres. Uno de los postres más populares es el pastel de zanahoria o tarta de zanahoria. La esponjosidad del bizcocho con zanahoria combina de 10 con la cobertura o frosting de queso crema. Este plato dulce se popularizó a raíz del racionamiento de alimentos tras la II Guerra Mundial en Reino Unido.
El Gobierno Británico recomendó a la población inglesa emplear zanahorias en lugar de azúcar como endulzante, puesto que el azúcar era un producto escaso y muy codiciado. No obstante, la primera receta documentada de pastel de zanahoria data del 1827 y es francesa.
El pastel de zanahoria cruzó fronteras y es una de las recetas dulces más importantes en Estados Unidos. Tanto es así que se dice que era el postre favorito del expresidente de Estados Unidos, George Washington. Este postre admite tantas versiones como se puedan imaginar, desde tarta de zanahoria con jengibre y lima hasta pastel de zanahoria con crema de queso y chocolate negro.
Contenidos
Lista de ingredientes
- 3 zanahorias grandes ralladas
- 150 g de harina de trigo
- 100 g de azúcar
- 2 huevos talla L
- 150 ml de aceite de girasol suave
- 10 g de levadura
- 5 g de bicarbonato sódico
- 1 cucharadita de canela molida
- 250 g de queso crema
- 125 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 100 g de azúcar glas
- Nueces troceadas
- Esencia de vainilla
- Sal
Utensilios necesarios
- Dos cuencos grandes
- Un cuenco mediano
- Batidora eléctrica
- Rallador
- Molde desmontable de 18 o 20 cm de diámetro
- Espátula
- Cuchara de madera
- Rejilla de horno
Pastel de zanahoria con cobertura de queso crema, paso a paso
- Precalentar el horno a 180°C por arriba y por abajo y engrasar el molde con mantequilla.
- Limpiar y rallar las zanahorias. Reservarlas en un bol.
- Batir los huevos y añadir esencia de vainilla y el azúcar hasta lograr una textura espumosa y cremosa.
- Añadir la zanahoria rallada y el aceite al cuenco. Batir hasta integrar perfectamente todos los elementos en la mezcla.
- En un cuenco grande, mezclar en seco con una cuchara de madera o espátula harina, bicarbonato de sodio, canela, levadura, sal y nueces troceadas.
- Una vez mezclados los ingredientes secos, incorporar de forma gradual a la mezcla de huevos, azúcar y zanahoria rallada.
- Integrar bien todos los ingredientes del bizcocho batiendo con movimientos envolventes hasta conseguir una masa homogénea.
- Esparcir la masa en el molde ya engrasado y distribuir bien la mezcla con una espátula.
- Hornear el bizcocho de zanahoria durante 45 o 50 minutos. Para saber si el bizcocho está listo, se puede insertar un palillo en el centro del pastel de zanahoria, si sale limpio ya se puede retirar el pastel del horno.
- Mientras el pastel se encuentra en el horno, se puede preparar la cobertura. Para ello se debe batir con unas varillas o batidora manual, la mantequilla y el azúcar glas.
- Una vez se consiga una textura sedosa y homogénea, incorporar el queso crema a la mezcla y batir de nuevo.
- Retirar el pastel de zanahoria del horno, desmoldar y colocar sobre una rejilla para que enfríe.
- Cubrir la superficie del pastel de zanahoria con la cobertura de queso crema. Espolvorear nueces picadas para decorar.
Consejos para elaborar un pastel de zanahoria con cobertura de queso crema perfecto
- Textura más suave. Cuanto más finas se rallen las zanahorias, mayor suavidad y esponjosidad tendrá la masa del bizcocho.
- Toque extra de sabor y textura. Agregar nueces picadas a la masa del pastel de zanahoria le aportará un plus de sabor y otra textura en boca.
- Temperatura. Es recomendable que el pastel de zanahoria esté frío antes de cubrirlo con el queso crema, de este modo no de derretirá.
- Refrigeración en nevera. Si se guarda en el frigorífico la cobertura de queso crema antes de añadirse al pastel de zanahoria, esta tendrá mayor densidad y cuerpo y el resultado será mucho más estético.
- Relleno. Se puede cortar el bizcocho a la mitad horizontalmente y untar el queso crema con nueces con ayuda de una lengua como relleno. Colocar la capa superior y cubrir la superficie con el queso crema restante y, voilá! una magnífica tarta de zanahoria rellana y cubierta de queso crema y nueces.