Bienestar animal en la industria láctea, ¿qué es, qué supone y cómo se vigila?

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El bienestar animal tiene un impacto significativo en la sostenibilidad de la producción de leche. Ser sostenible en la producción láctea significa poseer a la capacidad de mantener a largo plazo la producción de leche de manera económicamente viable, socialmente aceptable y ambientalmente responsable. El bienestar animal, por tanto, es un componente esencial de la sostenibilidad en esta industria por razones de diversa naturaleza, como la reducción de enfermedades o el uso eficiente de recursos naturales. El bienestar animal, además, puede medirse y reconocerse mediante diferentes certificados. 

¿Qué es el bienestar animal en la industria láctea? 

El bienestar animal en la industria láctea se refiere al conjunto de condiciones y prácticas que garantizan un trato ético y responsable hacia el ganado lechero a lo largo de su vida en las explotaciones lecheras. Se enfoca en asegurar que los animales reciban atención, alimentación, alojamiento y manejo que respeten sus necesidades naturales y les permitan llevar una vida libre de sufrimiento innecesario. 

El bienestar animal en la industria láctea es clave no solo para garantizar el respeto hacia los animales, sino también para mejorar la calidad y cantidad de la producción de leche, mantener la reputación de las explotaciones y satisfacer las expectativas de los consumidores preocupados por este tipo de valores. Además, el bienestar animal es un componente clave de la sostenibilidad en la producción láctea. Algunos motivos que lo explican son: 

• Espacio y comodidad. Proporcionar espacio adecuado en granjas, establos o pastizales para que las vacas se muevan, se acuesten y se levanten cómodamente es un elemento básico. Además, se deben ofrecer camas limpias y secas para el descanso. 
• Alimentación y nutrición. Ofrecer una dieta equilibrada y nutritiva que satisfaga las necesidades específicas de las vacas en las diferentes etapas de su ciclo de vida, como las vacas en lactancia, las secas y los terneros, supone favorecer el bienestar animal. Es importante garantizar el acceso constante a agua limpia y fresca. 
• Atención veterinaria. Una de las prácticas básicas del bienestar animal es programar revisiones de salud regulares por parte de un veterinario y garantizar la implementación de programas de prevención de enfermedades y control de parásitos.  
• Manejo suave. Utilizar prácticas de manejo de bajo estrés al interactuar con las vacas y evitar el uso de la fuerza bruta, golpes o gritos es un método útil para favorecer el bienestar animal. Además, también se debe proporcionar un ambiente tranquilo y predecible para reducir el estrés en las vacas. 
• Ordeño ético. Obtener leche sin dañar el bienestar animal supone realizar el proceso de ordeño de manera suave y sin causar dolor o lesiones a las vacas, así como mantener equipos de ordeño limpios y en buen estado de funcionamiento.
• Bienestar comportamental. Permitir que las vacas expresen comportamientos naturales, como pastorear, asearse y socializar con otras vacas. Ofrecer enriquecimiento ambiental, como juguetes o áreas para rascarse, para prevenir el aburrimiento. 
• Sostenibilidad ambiental. Adoptar prácticas agrícolas sostenibles que minimicen el impacto ambiental, como la gestión adecuada de estiércol y la conservación de recursos naturales. 

¿Cuál es el impacto del bienestar animal en la producción láctea? 

El bienestar animal no solo es una cuestión ética, sino que también tiene un impacto directo en la rentabilidad, la calidad de los productos lácteos, la relación con los consumidores y el cumplimiento de regulaciones. Por lo tanto, el bienestar animal es un componente integral de las prácticas sostenibles en la producción láctea y debe ser considerado en todas las etapas de la cadena de producción. 

• Eficiencia de producción. Animales con un alto nivel de bienestar suelen ser más saludables y productivos. Vacas lecheras que son tratadas adecuadamente y que tienen un buen bienestar generalmente producen más leche y mantienen una calidad de leche superior, además de una mayor longevidad. Esto contribuye a la eficiencia de la producción y a la rentabilidad de las explotaciones lecheras.  

• Reducción de enfermedades y costes veterinarios. Un ambiente de cría y ganadería que promueva el bienestar animal puede reducir la aparición de enfermedades y lesiones en el ganado. Menos enfermedades significan menos gastos en atención veterinaria y menos necesidad de utilizar antibióticos y otros medicamentos, lo que a su vez disminuye la presión sobre la resistencia a los antibióticos y reduce los riesgos para la salud pública.  
• Reputación y mercado. Los consumidores están cada vez más interesados en la producción láctea sostenible y en el bienestar de los animales. Las explotaciones que se preocupan por el bienestar animal pueden beneficiarse al promocionar sus prácticas éticas y atraer a consumidores que están dispuestos a pagar un precio más alto por productos lácteos premium, producidos de manera sostenible y con respeto a los animales.  
• Cumplimiento de regulaciones. En muchos países existen regulaciones y normativas que requieren un nivel mínimo de bienestar animal en las explotaciones lecheras. Cumplir con estas regulaciones es esencial para evitar sanciones y mantener una operativa legal.  
• Uso eficiente de recursos naturales. La gestión sostenible de los recursos naturales, como la tierra y el agua, es esencial para la producción láctea sostenible. Un enfoque en el bienestar animal puede contribuir a la optimización de la utilización de estos recursos.  

Certificaciones de bienestar animal en España 

Es importante destacar que los estándares de bienestar animal pueden variar según las normativas y las preocupaciones culturales y éticas de cada lugar. En muchas regiones, se han desarrollado protocolos y programas de certificación de bienestar animal, como el Programa de Bienestar Animal de la Asociación de Agricultores de Estados Unidos (USDA) o los estándares del Proyecto de Bienestar Animal de Global Animal Partnership (GAP), para promover prácticas de manejo y cuidado responsables en la producción lechera. Estos programas a menudo incluyen auditorías y evaluaciones regulares para garantizar el cumplimiento de los estándares. 

En España, al igual que en otros países, existen varios certificados y programas de bienestar animal que se aplican en la producción agrícola y ganadera para garantizar un trato ético y responsable hacia los animales. 

• Etiqueta Animal Welfare. Esta etiqueta certifica que el producto proviene de animales criados en condiciones que respetan su bienestar. Está respaldada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España.  
• Certificado Bienestar Animal AENOR. La Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR) ofrece un certificado de bienestar animal que evalúa las prácticas de manejo, alimentación y alojamiento de los animales de granja.