¿La mantequilla caduca? 3 señales que lo indican

La mantequilla es un alimento muy empleado en la cocina europea, especialmente en algunos países, como Francia y Reino Unido, gracias a su versatilidad a la hora de elaborar recetas dulces o saladas.

Este derivado lácteo es rico en vitamina A y es una fuente muy interesante de grasas para deportistas o personas que necesiten un elevado aporte energético, siempre y cuando su consumo sea moderado. Pero hoy no venimos a hablar de eso en Mundo Lácteo, hoy hablaremos de otra cuestión esencial de este producto: ¿La mantequilla caduca?

Este derivado lácteo, obtenido a través del amasado de la nata, es un alimento muy común que siempre está disponible en casi cualquier hogar. Aunque no precisa de un especial método de almacenaje, la mantequilla puede estropearse y hay una serie de señales que lo indican, señales que hoy te contaremos en este artículo de Mundo Lácteo. Además, también explicaremos cuáles son los pasos a seguir para conservar de manera correcta la mantequilla.   

3 señales que indican que la mantequilla no está en buen estado

Antes de conocer las señales que a simple vista delatan que la mantequilla no está en estado óptimo, es importante mencionar que este producto siempre viene acompañado de una fecha de caducidad, que indica que no es aconsejable consumir el producto, según señala la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN).

La mantequilla es un derivado lácteo con un alto porcentaje en grasa, en torno a un 80%, la cual actúa como un conservante natural, logrando que permanezca en buen estado durante largo periodo de tiempo. Es raro que la mantequilla se estropee, pero estas son algunas de las principales señales: 

• Textura líquida o cuarteada. La mantequilla es conocida por su textura suave y mantecosa. En el caso de que esta tenga un aspecto líquido o seco y cuarteado, la recomendación es no consumirla, ya que es posible que esté en mal estado.

• Olor fuerte. La mantequilla tiene un aroma natural que recuerda a la leche, mientras que una mantequilla tiene un olor desagradable debido al proceso natural de oxidación de las grasas presentes en este derivado lácteo.

• Cambios en el color. Un color amarillo oscuro tirando a marrón alerta que la mantequilla está en mal estado. El color natural de la mantequilla suele ser amarillo pálido. 

¿Qué ocurre si como mantequilla caducada?

Es esencial conocer la fecha de caducidad o la fecha de consumo preferente de los alimentos, ya que, a partir de entonces comenzará a perder sus propiedades y habrá más posibilidades de consumirlo en mal estado.

Como ya hemos explicado en este artículo, una de las mayores ventajas de la mantequilla es que puede permanecer en buen estado durante un largo periodo de tiempo, siempre y cuando las condiciones en las que esté almacenada sean óptimas. En líneas generales, la fecha de consumo preferente de este derivado lácteo suele variar entre los 6 y los 8 meses. 

Si bien, es importante tener una serie de cuestiones en cuenta: lo ideal es adquirir aquella mantequilla con la fecha de consumo lo más alejada posible y observar que antes de consumir la mantequilla tiene un buen color, textura y olor. 

En caso de consumir mantequilla en mal estado, el dolor de estómago será el síntoma más “alarmante”. De cualquier forma, si aparecen nuevos síntomas o empeoran, lo más recomendable es acudir a urgencias. 

¿Cómo conservar la mantequilla?

La forma más sencilla y generalizada de almacenar es en el frigorífico, pero también se puede conservar a temperatura ambiente, siempre y cuando esté protegida del calor, de la luz y del aire. Cumpliendo estos tres requisitos, la mantequilla mantendrá su sabor y su consistencia cremosa y mantecosa tan característica. En este caso, lo ideal es disponer de una mantequillera o de un recipiente con tapa. En cualquier otro caso, es recomendable evitar envases de plástico o de aluminio, ya que propicia la aparición de microorganismos que pueden estropear este derivado lácteo.

¿La mantequilla se puede congelar?

Sí, la mantequilla se puede congelar, pero hay que tener una serie de cuestiones en cuenta. Aunque no es estrictamente necesario, lo ideal es cortar la mantequilla en pequeñas porciones para cada uso y no descongelar el producto entero si no se va a utilizar. Respecto al envase donde almacenarla, lo más sencillo es emplear una bolsa de congelación o algún recipiente hermético.

Para realizar el proceso inverso, la mantequilla debe ser descongelada en el frigorífico o a temperatura ambiente, siempre y cuando esté alejada de fuentes de calor, como el horno o el microondas, de la luz directa y del aire. 

¿La mantequilla se estropea si no se guarda en el frigorífico?

Aunque ahora lo más común es guardar la mantequilla en el frigorífico, hace unos años la mantequilla era almacenada a temperatura ambiente. Pero, como ya hemos revelado a lo largo de este artículo, es imprescindible que la mantequilla esté en un lugar fresco y seco.

¿Cuánto dura la mantequilla en el frigorífico?

La mantequilla dura un tiempo aproximado de 6 a 9 meses en el frigorífico. Si bien, es importante prestar atención a la fecha de caducidad y en el que caso de que presente alguna de las señales que hemos indicado en este artículo (olor rancio, color oscuro, o textura líquida o cuarteada), lo recomendable es no consumirla. 

Un consejo muy importante: es esencial no almacenar la mantequilla en la puerta de la nevera, algo muy común, ya que es el lugar donde se producen más cambios de temperatura.