Falta de Vitamina D, ¿cuáles son las consecuencias?

La vitamina D es una vitamina liposoluble que interviene en diversas funciones vitales del organismo. En este artículo de Mundo Lácteo analizaremos qué es la vitamina D, cuáles son los síntomas de su déficit en el organismo, sus principales consecuencias y cómo alcanzar la dosis diaria recomendada por los expertos.

¿Qué es la vitamina D?

La vitamina D es un nutriente esencial para el correcto desarrollo y funcionamiento del organismo. La vitamina D contribuye a la absorción del calcio, ayuda a mantener los huesos y los dientes sanos y fuertes, protege la piel del envejecimiento prematuro y tiene un papel clave en el funcionamiento del sistema inmune.

Recomendación diaria de vitamina D

Un estudio realizado por el Servicio de Endocrinología del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid señala que los requerimientos nutricionales de la vitamina D dependen de la edad, del sexo y de diversas etapas fisiológicas, como el embarazo y la lactancia. 

En la siguiente tabla comprobamos la ingesta adecuada (AI) y la ingesta máxima tolerada (UL) de vitamina D al día:

	Ingesta adecuada (mcg/día)	Ingesta máxima tolerada (mg/día)
Bebés de 0 a 12 meses	5	25
Niños de 1 a 13 años	5	50
Adolescentes de 14 a 18 años	5	50
Hombres y mujeres de 19 a 50 años	5	50
Hombres y mujeres a partir de los 50 años	10-15	50
Mujeres embarazadas	5	50
Mujeres en periodo de lactancia	5	50

*Fuente: Servicio de Endocrinología del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid

Causas y síntomas de la falta de vitamina D

Un estudio realizado por la University of Arkansas for Medical Sciences señala que la falta de vitamina D “está causada habitualmente por la falta de exposición a la luz solar”. También influyen otro tipo de factores relacionados con el tipo de piel, de la edad y la alimentación

El déficit de vitamina D es manifestado a través de diversos síntomas que pueden ser confundidos con otras afecciones. La deficiencia de este nutriente provoca debilidad muscular, dolor de cabeza, problemas digestivos, fatiga y cansancio, un estado de ánimo más bajo, y además, debilita el sistema inmunológico.

Consecuencias del déficit de vitamina D

La Asociación Española de Biopatología Médica (AEBM) expone que existen ciertas enfermedades asociadas al déficit de vitamina D, como la osteomalacia, el raquitismo y la osteoporosis. 

• Osteomalacia. Es una enfermedad que provoca el reblandecimiento de los huesos debido a la disminución de la mineralización del calcio. Esta enfermedad afecta a personas de la tercera edad mayores y puede ser tratada con la suplementación de vitamina D y con una exposición solar controlada. 

• Raquitismo. El raquitismo es una enfermedad que afecta al desarrollo de los huesos en las primeras etapas de crecimiento. El Servicio de Endocrinología Pediátrica del Hospital Sant Joan de Déu (Barcelona) señala que “la mayor parte de los casos de raquitismo se deben a carencias de vitamina D y calcio”, aunque un 13% de ellos tienen origen genético.

• Osteoporosis. Es una enfermedad que afecta a la resistencia de los huesos, provocando que sean más delgados y frágiles. Es producida por un déficit de minerales y en España afecta a más de 3 millones de personas, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). 

El déficit de vitamina D también está asociada a la hipocalcemia, un trastorno que afecta a los niveles de calcio en sangre. Los niveles normales de calcio en sangre comprenden de los 8,5 a los 10,2 mg/dL.

Un estudio realizado por especialistas de Medicina Familiar y Comunitaria del Centro de Salud Concepción Arenal (Santiago de Compostela) señala que el déficit de este nutriente también está relacionado con enfermedades del aparato digestivo y del sistema renal. 

¿Qué personas son más propensas a presentar déficit de vitamina D?

Existen algunos grupos de riesgo más propensos a presentar déficit de vitamina D. Las personas mayores de 65 años tienen mayor probabilidad de sufrir esta carencia. 

Un estudio del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid señala que “una persona de etnia india o asiática requiere tres veces más tiempo de exposición solar para alcanzar el mismo nivel de vitamina D que otra de piel clara.” Las personas de etnia afroamericana de piel muy oscura necesitan diez veces más. 

¿De dónde obtengo la vitamina D?

El estudio “Metabolismo, fuentes endógenas y exógenas de vitamina D”, elaborado por el Servicio de Endocrinología del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid, explica que las principales fuentes de vitamina D son: el sol, los alimentos naturales, los alimentos funcionales y los suplementos farmacológicos.

El sol 

El sol es la principal fuente de vitamina D. Una exposición controlada, entre 5 y 15 minutos al día, durante los meses de primavera, verano y otoño permite “mantener los depósitos de la vitamina en niveles adecuados”. 

La síntesis de este nutriente depende de la cantidad de dehidrocolesterol, una enzima encargada de la producción de colesterol, y de melanina. Los profesionales recomiendan evitar tomar el sol en horas centrales para evitar la aparición de reacciones alérgicas cutáneas, quemaduras, melanomas o carcinomas.

Alimentos 

Existen ciertos alimentos ricos en vitamina D como el atún, el salmón, los huevos, la mantequilla y la carne de hígado. En la siguiente tabla comprobamos la presencia de vitamina D en determinados alimentos por cada 100 gramos de producto: 

	Cantidad de vitamina D (mcg.)
Atún	25
Salmón	8
Sardina	7,9
Huevos	1,75
Leche entera	0,1
Yogur	0,04
Queso curado	0,9
Nata	0,28

*Fuente: Servicio de Endocrinología del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid

El estudio del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid señala que la cantidad de vitamina D en los alimentos “es estable” y además, “el calor y los procesos tecnológicos no la destruyen”. 

Alimentos funcionales

Los alimentos funcionales son aquellos enriquecidos en nutrientes “con el objetivo de prevenir o corregir una deficiencia demostrada”. Los lineales de los supermercados y tiendas disponen de una gran variedad de alimentos enriquecidos con vitaminas y con minerales, como el calcio. El sector lácteo cuenta con productos enriquecidos en vitamina D, como la margarina, la mantequilla y la leche.  

Suplementos farmacológicos

La vitamina D también puede obtenerse a través de suplementos disponibles en farmacias o en boticas. Si bien, lo recomendable es consumirlos sólo bajo prescripción médica o nutricional y después de que un análisis detecte ese déficit que debe ser solventado.

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