
El queso es uno de los productos lácteos preferidos y más apreciados por todo el mundo. Además, debido a que este producto se elabora a partir de leche, comparte muchas de sus propiedades y beneficios, siendo un alimento perfecto para incluir en todo tipo de dietas sanas y equilibradas.
El proceso de elaboración del queso es diferente al de otros productos lácteos como la nata o la mantequilla. Por ejemplo, en su elaboración se elimina el agua presente en la leche, lo que hace que sus proporciones en vitaminas, minerales y proteínas sean muy diferentes, ya que el queso concentra más estos nutrientes que otros derivados lácteos.
Por lo tanto, el queso es un alimento completo con múltiples propiedades y beneficios para nuestro organismo, pero… ¿Cuáles son estos beneficios?
Contenidos
4 propiedades del queso más nutritivas
El queso es un producto lácteo muy rico en micronutrientes necesarios para el correcto funcionamiento del organismo. No obstante, existen muchos tipos de queso, cada uno con diferentes propiedades, aunque muchas de ellas son comunes. Estas son las principales:
Vitaminas
Las vitaminas que se encuentran en mayor proporción en el queso son las vitaminas A y D, pese a que también se pueden encontrar vitaminas del grupo B. Dentro de estas últimas, la vitamina B1 (tiamina), la B2 (riboflavina), la B9 (ácido fólico) y la B12 (cobalamina) son las de mayor relevancia.
Proteínas
El queso es un alimento rico en proteínas, mucho más que la leche. Esto se debe a que durante su proceso de elaboración se elimina parte del agua presente en la leche, lo que hace que se concentren mayor cantidad de proteínas. Además, las proteínas que contiene el queso tienen un alto valor biológico, lo que las convierte en un complemento ideal para cualquier dieta sana.
Hay muchos quesos elaborados con diferentes tipos de leche, como la de cabra. Esta leche contiene naturalmente más proteínas que la de vaca, por lo que los quesos elaborados con esta materia prima también tendrán una mayor concentración de las mismas.
Minerales
El calcio es el mineral que se encuentra en mayor proporción en el queso. El ingrediente principal del queso es la leche, uno de los alimentos que mayor cantidad de calcio contienen, por lo que es normal que el queso también sea rico en este mineral.
El calcio presente en el queso cuenta con una ventaja que otros derivados lácteos no tienen, y es que las proteínas presentes en el queso facilitan la absorción del calcio, lo que redunda en importantes beneficios para el organismo.
Grasas
Por último, las grasas del queso son uno de los puntos fuertes y más distinguidos de este alimento, ya que son fácilmente digeribles. Sin embargo, estas grasas saturadas también son su punto negativo, debido al aporte de calorías que suponen. Es por este motivo por el cual el queso debe consumirse en las cantidades recomendadas.
Estas cantidades dependen del tipo de queso, ya que, según su cantidad de grasa, existen quesos desnatados (menos de un 10% de grasa), semidesnatados (10-25% de grasa), semigrasos (25-45% de grasa), grasos (45-60% de grasa) y extragrasos (más de un 60% de grasa). Esto convierte al queso en un alimento muy versátil y, a diferencia de la creencia común, no siempre es un alimento con alto contenido graso.
Por qué incluir el queso una dieta equilibrada
En definitiva, el queso es un alimento muy completo que, si no es consumido en exceso, cuenta con innumerables propiedades y beneficios para el cuerpo humano.
La cantidad recomendada de este derivado lácteo es de unos 30-50 gramos diarios en la ingesta de quesos curados. Sin embargo, al hablar de quesos frescos la cosa cambia, ya que la cantidad recomendada aumenta hasta los 100 gramos.
Dado que un adulto sano necesita de media 2-3 productos lácteos al día (3-4 raciones diarias en el caso de las embarazadas), su consumo dependerá de los nutrientes necesarios para cada persona, dependiendo de su edad y sus condiciones individuales.
10 Beneficios del queso para la salud
Su sabrosísimo e irresistible sabor podría ser el primer beneficio del queso, pero el queso es un alimento que no solo destaca por su sabor y por sus múltiples usos en la cocina, sino también por sus numerosos beneficios para la salud.
1. Ayuda al correcto funcionamiento del organismo
Gracias a la alta concentración de aminoácidos presentes en el queso, este alimento es ideal para mejorar el funcionamiento del organismo y estimular el desarrollo infantil. Esto se debe a que los aminoácidos forman proteínas cuando se juntan entre sí, con todas las ventajas que eso supone para el organismo.
Los tipos de queso con mayor concentración de aminoácidos son los quesos curados o madurados y, dentro de ellos, los viejos.
2. Reduce la aparición de enfermedades crónicas
El queso contiene altas cantidades de ácido linoleico conjugado (CLA) y esfingolípidos, ambos componentes con propiedades que reducen el riesgo a contraer enfermedades del corazón y cánceres, convirtiendo al queso en un alimento nutritivo y de gran valor para el cuerpo humano al mismo tiempo.
3. Reduce la tensión arterial
Uno de los grandes mitos que giran alrededor del queso es que produce colesterol, pero no es cierto. El consumo de queso en las cantidades recomendadas ayuda precisamente a reducir la tensión arterial, evitando la aparición de muchas enfermedades de tipo cardiovascular o diabetes.
4. Mejora la salud ósea
Gracias al aporte de calcio, vitaminas y de proteínas presentes en el queso, las cuales favorecen su absorción, el organismo es capaz de aprovechar al máximo el aporte cálcico.
5. Aporta energía
El queso es uno de esos alimentos todoterreno con múltiples beneficios en un solo bocado. Es una comida idónea para deportistas y para cualquier persona que desee contar con una dosis extra de energía.
6. Fortalece los dientes
La gran concentración de calcio presente en el queso también repercute directamente en la salud bucodental. Gracias al alto contenido de este mineral el consumo de queso es capaz de aumentar la creación de saliva y reducir la placa bacteriana, ayudando a mantener una boca sana.
7. Mejora la visión y el sistema inmunitario
Aunque normalmente no se relaciona al queso con la vista, el consumo de este alimento supone un gran aporte de vitamina A y D, ideales para mejorar la visión y reforzar el sistema inmunitario.
8. Mejora la salud de la piel
Para estar bien por fuera, primero es necesario estar bien por dentro. Esta premisa es correcta y el queso es uno de esos alimentos que ayudan a hacerla realidad gracias a su alto contenido en vitaminas A y B, que nutren y mejoran la salud y aspecto de la piel.
9. Contiene ácido fólico necesario para las embarazadas
El queso es uno de los alimentos más recomendados en la dieta de las mujeres embarazadas. Esto se debe a que el queso es uno de los productos lácteos que mayor cantidad de ácido fólico contiene, con importantes beneficios durante el embarazo.
Entre estos beneficios destacan la reducción del riesgo de sufrir anemias, abortos, nacimientos prematuros o problemas de desarrollo en el tubo neural del feto. Igualmente, el consumo de queso estimula la producción de leche materna, siendo un complemento genial para las mujeres lactantes.
Algunos de los quesos con mayor nivel de ácido fólico son los maduros y los azules.
10. Aporta felicidad
El queso nos hace un poco más felices. Así es. El queso, especialmente el curado, contiene cristales de tirosina, muchas veces detectables a simple vista, ya que son pequeños puntitos blancos presentes en el queso que para nada son perjudiciales para la salud. Esta sustancia química es uno de los componentes de la dopamina, neurotransmisor causante de la felicidad. Por lo que, consumiendo queso, el cerebro sentirá mayor bienestar, es decir, seremos más felices.
Estos son solo algunos de los principales beneficios y propiedades del queso, pero existen muchos más. Sin duda, uno de los alimentos más antiguos y completos de nuestra sociedad que ayudan a completar cualquier tipo de dieta sana.